
¿Pueden las personas confiar en las empresas? Y además ¿deben las empresas preocuparse por que las personas confíen en ellas? Las relaciones de confianza entre empresas y personas tienen similitudes, pero también diferencias sustanciales con la confianza entre personas. Dos variables parecen fundamentales, la percepción de coherencia y la posibilidad de reconocer legitimidad en la organización. En particular en la confianza de empresas dedicadas a actividades extractivas como la minería. Este artículo presenta una propuesta que reúne elementos conceptuales y señala mecanismos prácticos para construir un índice de confianza empresarial dirigido a las relaciones entre empresas mineras y públicos concernidos de su actividad y ciudadanos en general, en sus zonas de influencia.
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